El seleccionado argentino masculino de handball, Los Gladiadores, derrotó esta noche a su par tunecino por 23 a 21, en un cotejo correspondiente a la cuarta fecha del grupo B de los Juegos Olímpicos de Río y aún conserva sus chances de avanzar a los cuartos de final.
Argentina, que venía de tres derrotas consecutivas: Dinamarca (25-19), Croacia (27-26) y Francia (31-24), jugó un gran partido ante Túnez y si le gana a Qatar se meterá entre los ocho mejores equipos del certamen, -algo que, según Télam, nunca sucedió-.
El elenco que dirige Eduardo Gallardo tuvo un excelente comienzo, con mucha concentración en defensa para aprovechar los errores de su rival y con contundencia en ataque para ponerse 5-1, con tres goles de Federico Pizarro, uno de Federico Fernández y otro de Sebastián Simonet, antes de los 9 minutos de partido.
El segundo tiempo tuvo un bajo nivel técnico y se convirtió en algo más físico. El equipo africano poco a poco se fue acercando en el marcador: 15-13, a los 7 minutos; 16-15, a los 11; y lo empató 16-16, a los 12 minutos, con un gran trabajo de Oussama Boughanmi.
Argentina -que bajó notablemente su efectividad en ataque- se puso arriba en el tanteador, con las conquistas de Pablo Simonet y Pizarro y más tarde 21-17, con los tantos de Sebastián Simonet, Federico Fernández y Pablo Simonet. En ese lapso, además, el arquero Fernando García atajó un penal. Un partido durísimo, que recién se definió en los minutos finales a favor de Los Gladiadores por 23 a 21.
El lunes, el equipo argentino definirá si se mete en cuartos de final o vuelve a casa.